Hola a todo el mundo soy Fina Trullàs, desde la proximidad que me ha dado el acompañamiento, en estos últimos años, de cada uno de vosotros, en el proceso de resiliencia, apego, trauma,  creo que se hora de hablaros sobre la necesidad de protegernos psicológicamente. No hablamos de política ni  de sanidad, sino de la necesidad de preservar nuestra salud mental, esta capacidad que tenemos que tener todos para poder salir adelante.

Es tiempo de ser resilientes. Ahora es cuando nosotros nos tenemos que mostrar, tenemos que encarar las dificultades, las adversidades, hacer surgir esta capacidad que todos tenemos, que todos  hemos tenido, y en un momento u otros de nuestra vida hemos tenido que activar, en situaciones no queridas, no esperadas, incluso dolorosas. Hay que activar nuestra habilidad, como humanos, de adaptarnos a otro medio a otra coyuntura, toca salir de nuestra área de confort, las circunstancias nos  obligan.

Si observamos la naturaleza nos daremos cuenta que todo cambia, las estaciones, los ciclos….todo se mueve, todo se transforma, todo tiene un inicio y un final. Esto que nos está  pasando ahora también tendrá un final, y lo importan que hacemos aquí y ahora,  ¿Qué explicaremos cuando salgamos de todo esto? ¿Cuál  será nuestro relato de lo que ha pasado, habremos sabido  aprovechar la oportunidad de descubrir todo lo que nos ha ofrecido este movimiento?

Esta capacidad de resiliencia nos viene dada por nuestra experiencia, viene del apego que hemos tenido en nuestra infancia, apego seguro o apego inseguro. También viene dado por los traumas que nos ha tocado vivir a lo largo de nuestra vida, aquellos traumas que muchas veces hemos resuelto y otras han quedado para resolver ¿Este momento nos da tiempos para observarnos para decidir quién somos? ¿Qué queremos hacer? ¿Qué nos hace felices?… Cultivando aquellas pequeñas cosas que nos gustan, que nos hacen felices, haciéndolas grandes, disfrutándolas. Cómo aquel caramelo de anís que comíamos cuando éramos pequeños y parecía poca cosa pero éramos capaces de degustarlo hasta que se fundía.

Evidentemente este mensaje resonará diferente a cada persona, es muy difícil hacer un mensaje para animar las ganas de avanzar, de vivir, las ganas de seguir aquí, las ganas de luchar desde el yo compartiendo con los otros, este equilibrio tan importante de conseguir entre los otros y el yo que nos da fuerza para avanzar.

Sin tener sentimiento de culpabilidad, sin juzgar, haciendo lo que creemos necesario en cada momento, de manera consciente, sin compararnos, desde nosotros, pensemos que podemos ofrecer.

Este momento que dedicaremos a una persona que está próxima, que es una persona que forma parte de la red de buenos tratos.

Momento para revisar cual es nuestra red de buenos tratos, quién  forma parte, qué personas nos han sostenido emocionalmente en algún momento de la vida, o se han dejado sostener por nosotros.

¿Cómo será nuestra respuesta? ¿Qué haremos? ¿Huiremos, atacaremos o nos quedaremos inmóviles?…Esto es lo que tenemos que revisar cuál es nuestra manera de reaccionar ante situaciones tan desbordantes.

Se nos activará el miedo, se nos activará la rabia, la frustración, la tristeza…cómo  gestionamos todas estas emociones.

El mundo continúa, si nos encallamos en el pasado o miramos solo el futuro no estaremos viviendo la vida desde la aquí y la ahora, desde la conciencia….Levantarnos por la mañana, abrir la ventana, y percibir que estamos aquí y que por muy poquitas cosas que creemos tener, estas pueden llegar a ser muy importantes.

Momentos para llenar nuestros neurotransmisores de dopaminas, de serotoninas, de oxitocinas vallando el paso al cortisol, que es lo que nos da esta sensación de estrés, nos hace ver la vida con unas lentes opacas. Regalémonos cosas bonitas, cosas que nos llenan, regalemos a los otros aquello que sabemos que los gusta, a veces una simple llamada sin prisas, disfrutando de la conversación, escuchando al otro.

Cada cual ejercita aquello que le gusta: moverse, cocinar, reír, bailar, hablar, meditar…

Hablar es importante, poder narrar nuestra realidad a otra persona y ser escuchados  nos permitirá sentir como nosotros mismos explicamos nuestra realidad.

Es  momento de protegernos, no hace falta mucha información, hace falta la información justa, la que necesitamos, la que necesitamos para  sobrevivir, para pasar estos momentos.

Disfrutemos de nuestra creatividad, de nuestro sentido del humor, de aquella manera de pasar el día tan diferente.

No todo el mundo tenemos la misma realidad, hay gente a la que le toca ir a trabajar y luchar, hay gente a la que le toca estar en casa y también luchar, todos estos héroes y todas estas personas que estamos activando la capacidad de resiliencia, que muchas veces lo hemos tenido escondida porque no nos ha hecho falta, ahora es el momento de reactivarla, el momento de poner nuestro granito de arena para mejorar esta vida.

Os animo a usar las estrategias que a vosotros os gustan: escribir, hacer videos, canciones, música, pintar, sengtir en contacto con la tierra…. aunque sea remover aquella maceta pequeña que teníamos en un rinconcito de nuestro balcón.

Tiempo para comer pausadamente sin prisas, masticando intensamente la comida que hemos hecho por nosotros y por los otros, o bien  que nos ha ofrecido algún amigo.

Nadie nos dijo que vivir sería fácil, ahora estamos aquí, estamos en pie, luchando por nosotros y por todos, por la gente que nos estimamos y toda la gente que sabemos que nos quiere. Merece la pena agradecer todo el que tenemos. Los buenos recuerdos que tenemos.

Espero que este mensaje os llegue, os llegue al corazon y que cuando esto se acabe seamos capaces de mirarnos y abrazarnos con la intensidad que hemos deseado todo este tiempo.

Hasta muy pronto,

Y esto es tiempo de resilientes.

Cuidaos y cuidad a los vuestros.

Mi agradecimiento a Motse Vallès por su colaboración

Temps de Resilients
Observemos la naturaleza